Principios – Santiago de Compostela
El pasado miércoles 30 de marzo, en Santiago de Compostela, tuvimos la oportunidad de disfrutar de una buenas cañas en el Industrial, acompañados de Rafael García Pérez (Profesor en el Departamento de Dº Público y Tª del Estado en la Universidad de Santiago de Compostela) e Iria Gippini (Coordinadora de Médicos del Mundo). Ambos compartieron con el público (alrededor de 30 personas, casi todas jóvenes universitarios) sus conocimientos y opiniones personales acerca de un tema de actualidad y muy polémico: la crisis migratoria de los refugiados.
Comenzó hablando Rafael García, quien, mostrando una perspectiva más académica sobre el asunto, empezó definiendo la problemática como compleja y advirtiendo que no se debe gestionar desde las emociones. Puso de relieve la incapacidad de los países europeos para hacer frente a esta situación: destacó la falta de recursos para gestionar, y describió cómo detrás de esta crisis existen cruzados intereses de índole política. Por último, insistió en la urgente necesidad de construir políticas de inmigración a largo plazo, con una legislación a nivel europeo equilibrada y de obligado cumplimiento para todos los países miembros.
Continuó Iria Gippini, con una breve explicación acerca de Médicos sin Fronteras y su labor principal: defender y vigilar el cumplimiento de los derechos humanos y vigilar que se cumplan; y en especial el derecho a la salud, así como informar a la sociedad y denunciar sus incumplimientos. Narró la experiencia de la organización en los campos de refugiados, describiendo las condiciones precarias en que viven miles de personas. Reveló datos asombrosos del 2014: «De 59,5 millones de desplazados por causas forzadas, un 86% fueron acogidos en países pobres». Recalcó la necesidad de conceder derecho de asilo a los refugiados, y demandó una protección especial a las mujeres con niños. Cerró su ponencia afirmando que la labor de los Estados es garantizar los derechos humanos.
Ambos ponentes destacaron la capacidad y la necesidad de acoger refugiados en España, resaltando las siguientes palabras de Rafael García: ¨la inmigración es riqueza para el país receptor y pobreza para el país emisor¨ y la siguiente afirmación de Iria Gippini: ¨no es real que sea demasiada gente: el número de personas que se hallan en los campos de refugiados no representa ni un 5% de la población europea¨.